Ha muerto el legendario Hector Gaitán, celébre cronista, historiador, periodista y probablemente el mejor cuentacuentos que Guatemala haya dado, fue a las 8:30 de la mañana cuando debido a complicaciones de una operación de colon que se le había practicado en el Hospital General apenas una semana y días átras termino sucumbiendo a los 72 años.
Gaitán fue llevado de emergencia a dicho hospital a causa de una infección que al final de cuentas se le agravó, por lo que requirio su internamiento en el hospital donde exhaló hoy por la mañana,
Con su muerte el país pierde a una gran figura dentro de la tradición oral guatemalteca, cuyo legado lo constituyen 8 tomos de la fabulosa colección "La Calle Donde Tu Vives", dos tomos de las "Memorias del siglo XX en Guatemala", "El Centro Historico", "Los Fusilamientos en Guatemala", "Los Presidente de Guatemala", y "Recetario Curioso de Maximón" en total 23 obras publicadas muchas de ellas Best-Sellers y todavía con gran material por publicar.
Nacido en 1939, Gaitán hizo de todo, y abarco todos los medios posibles pasando por la radio, televisión y prensa, su formación académica abarco México, Estados Unidos y por supuesto Guatemala donde se desarrollo con todas las de ley, todo un libro andante el buen Gaitán se sabia todas, desde anécdotas sobre presidentes e ilustres personajes guatemaltecos, hasta leyendas e historias escalofriantes de muertos y aparecidos, siendo el sombrerón uno de sus preferidos según contaba.
Legendarias y maratonicas fueron esas transmisiones de radio frente a cementerios de algunos departamentos y la gente hipnotizada pasaba horas y horas escuchando los cuentos, de ahí fue donde acuño la iconica frase: “Como me lo contaron, se lo cuento”, sin duda el toque de su trabajo descansaba en lo escalofriante, tenebroso e intrigante que fueron muchas de sus narraciones y anecdotas
Al respecto de la muerte dijo una vez: el tiempo no existe, que esto que vivimos, esto que platicamos, todo es como una película, un sueño que estamos viviendo, y cuando me despierte, no sé dónde voy a estar, uno pasa por el tiempo sin sentirlo y, cuando viene la muerte, después de ese proceso que nadie sabe qué es ni a dónde va, los segundo pueden ser centurias, quién sabe, eso dicen los grandes pensadores reflexionó.
Todo un fuera de serie sin dudas, que desgracidamente no obtuvo la recompensa monetaria que de verdad merecia, no es que tampoco estuviera mal viviendo pero uno se pone a pensar que un personaje de su talla hubiera vivido de una mejor forma de haber desarrolado su carrera en el extranjero, fue triste saber en diciembre que se esta pidiendo colaboración economica para poder realizarle la operación que eventualmente se lo llevaría a la tumba, y lo más increible del caso es que muchos de sus libros fueron best-seller, pero así es la vida en Guatemala donde el arte no vale nada y sus mejores exponentes estan condenados a emigrar para lograr la gloria y así evitar padecer este tipo de canalladas que no se merecen, al menos una figura como el gran Hector Gaitán no.
Y es que la magia de Gaitán era inigualable y siempre lograba a uno engancharlo a sus cuentos, sus libros son geniales portales al pasado de una Guatemala antañona y curiosa que jamás volverá y sus relatos y anecdotarios dignos para hacerles una seria de televisión (haber si esos mediocres de Casa Comal intentarán algo), no digamos los curiosos y extraños relatos sobre conspiraciones, muertes extrañas y excentricidades de los presidentes, fusilados y personajes de la vida cotidiana del país.
Que en paz descanse Don Hector sin duda el mejor homenaje que podemos hacerle es comprar sus libros y seguir manteniendo viva la tradición oral guatemalteca que poco a poco palidecé entre los ajetreos cotidianos y el voraz desarrollo urbano.
Gaitán fue llevado de emergencia a dicho hospital a causa de una infección que al final de cuentas se le agravó, por lo que requirio su internamiento en el hospital donde exhaló hoy por la mañana,
Con su muerte el país pierde a una gran figura dentro de la tradición oral guatemalteca, cuyo legado lo constituyen 8 tomos de la fabulosa colección "La Calle Donde Tu Vives", dos tomos de las "Memorias del siglo XX en Guatemala", "El Centro Historico", "Los Fusilamientos en Guatemala", "Los Presidente de Guatemala", y "Recetario Curioso de Maximón" en total 23 obras publicadas muchas de ellas Best-Sellers y todavía con gran material por publicar.
Nacido en 1939, Gaitán hizo de todo, y abarco todos los medios posibles pasando por la radio, televisión y prensa, su formación académica abarco México, Estados Unidos y por supuesto Guatemala donde se desarrollo con todas las de ley, todo un libro andante el buen Gaitán se sabia todas, desde anécdotas sobre presidentes e ilustres personajes guatemaltecos, hasta leyendas e historias escalofriantes de muertos y aparecidos, siendo el sombrerón uno de sus preferidos según contaba.
Legendarias y maratonicas fueron esas transmisiones de radio frente a cementerios de algunos departamentos y la gente hipnotizada pasaba horas y horas escuchando los cuentos, de ahí fue donde acuño la iconica frase: “Como me lo contaron, se lo cuento”, sin duda el toque de su trabajo descansaba en lo escalofriante, tenebroso e intrigante que fueron muchas de sus narraciones y anecdotas
Al respecto de la muerte dijo una vez: el tiempo no existe, que esto que vivimos, esto que platicamos, todo es como una película, un sueño que estamos viviendo, y cuando me despierte, no sé dónde voy a estar, uno pasa por el tiempo sin sentirlo y, cuando viene la muerte, después de ese proceso que nadie sabe qué es ni a dónde va, los segundo pueden ser centurias, quién sabe, eso dicen los grandes pensadores reflexionó.
Todo un fuera de serie sin dudas, que desgracidamente no obtuvo la recompensa monetaria que de verdad merecia, no es que tampoco estuviera mal viviendo pero uno se pone a pensar que un personaje de su talla hubiera vivido de una mejor forma de haber desarrolado su carrera en el extranjero, fue triste saber en diciembre que se esta pidiendo colaboración economica para poder realizarle la operación que eventualmente se lo llevaría a la tumba, y lo más increible del caso es que muchos de sus libros fueron best-seller, pero así es la vida en Guatemala donde el arte no vale nada y sus mejores exponentes estan condenados a emigrar para lograr la gloria y así evitar padecer este tipo de canalladas que no se merecen, al menos una figura como el gran Hector Gaitán no.
Y es que la magia de Gaitán era inigualable y siempre lograba a uno engancharlo a sus cuentos, sus libros son geniales portales al pasado de una Guatemala antañona y curiosa que jamás volverá y sus relatos y anecdotarios dignos para hacerles una seria de televisión (haber si esos mediocres de Casa Comal intentarán algo), no digamos los curiosos y extraños relatos sobre conspiraciones, muertes extrañas y excentricidades de los presidentes, fusilados y personajes de la vida cotidiana del país.
Que en paz descanse Don Hector sin duda el mejor homenaje que podemos hacerle es comprar sus libros y seguir manteniendo viva la tradición oral guatemalteca que poco a poco palidecé entre los ajetreos cotidianos y el voraz desarrollo urbano.
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